lunes, 24 de enero de 2011

Pelusita al viento (Otra prueba mas...)

Se desmadejan como hilos de seda
antes se quedaban donde deben estar,

ahora miro mis manos, mis dedos ensortijados

rizos incontables en el peine de marfil…

Como pluma y pelusas los pelos de ángel

el velo oscuro me está siendo quitado

y la frondosa negrura cae a mis pies

su único freno es el suelo

filamentos incontables no alcanzo a sumar…

*

Permanezco inmóvil, impávida, estática

como si eso fuese un remedio a lo inevitable,

me siento como flor silvestre… diente de león

tratando de esconderme entre la maleza

cuando tan solo un leve aire amenaza ir a donde estoy…

Soy flor que temo al rocío

a la ínfima lluvia que insiste en caer

partículas de agua se llevan preciado tesoro

gotas heladas segando los campos

los trigales otrora llenos de espigas

los granos ya no entregarán…

*

Molinillo cuyas astas entregas al viento

veo enorme boca soplando insistente

aleteo peligroso del colibrí enamorado

que se acerca al negro clavel bravo

los estambres que tejían caminos sinuosos

van desapareciendo como nubes fugaces…

lianas resistentes colgantes del frondo roble

donde un Tarzán se paseaba tras una Jane

ya no existen más…

*

Cabellos de plata, de oro y de cobre

tintada negrura cual noche azabache

ya se difuminará…

Mechones que enmarcaban rostro sereno

se convierten en hebras delgadas, etéreas,

que van descubriendo tras débil flequillo

unos ojos negros y tristes sin lágrimas ya…

Coletas de colegiala en mis recuerdos

cola de caballo diseñada por manos maternales

trenzas incorpóreas atan pelo imaginario

que cuelgan sobre el cuello con cintas de color…

*

Lazos blancos en mi pelusita de nena

diademas rosas en mi pubertad

listones amarillos rodeaban mi frente

cuando adolescente encontré el amor…

un broche de oro prendió los negros bucles

al encontrar el destino que siempre busqué,

y un moño rojo acompañaba la melena de india

cuando me enfrenté a los laberintos de la pasión…

*

Ahora la madeja ha sido diezmada

la cabellera porta muy pocos cabellos

cada día van siendo menos sin causa visible

como si dedos intangibles los arrancaran

siento que vuelan como pájaros negros

alzando cada día un nuevo vuelo

como si la estación de emigrar iniciara

me siento desnuda aún vestida

siento mas el frío aunque esté abrigada

y el invierno ya casi en su despedida

dejase la puerta entreabierta para que no lo olvidara…

*

¡ Amor mío!

¡ Ven ! ¡ Dame tu pañuelo! ¡ Dame tu libro !

O tu cofre de oro

O ¡ Dame tu mano! donde pueda depositar

aunque sea un mechón del cabello que tanto admiraste

quizás mañana… o un dia de estos ya no pueda mas…

Tal vez sólo te quede el consuelo

de la imagen impresa

de un cabello negro y brillante

que como noche oscura relucía con broches de estrellas

y la luna de plata bañando su sinousidad…

¡ Ven pronto ¡ y da una caricia a su sedosidad…

*

¡ Ven enjuga las lágrimas tristes que pronto brotarán!

¡ no hay peor castigo para una india

que perder su tesoro, su velo de novia, su ofrenda ante el altar!

¡ No hay peor humillación!

Al no tener donde sembrar los azahares

como cubrir su cuerpo cuando sus prendas lava en el río

no tener las trenzas tejidas que el amado insistirá en soltar

no saber dónde poner el aceite perfumado

cada noche que el amor la cobijará…

¡ Ven y besa mi frente!

Consuela mis congojas y mi miedo

deposita en mis labios un beso

que me diga esa palabra que necesito…

que aun en la aridez se dan bellas flores

y que el desierto las sabe cuidar

dime con la certeza sincera

que me haga sentir que esto…

esto… solo es una prueba más…

*

Vicky E.Durán

Enero 2011